Las mujeres campesinas en Colombia no tienen la misma participación que los hombres, pues ellas tienen menos acceso a tierras y créditos. Sin embargo si tienen una mentalidad distinta. Realizamos una investigación en la que las mujeres de Matanza, Santander, quienes gracias a un programa de una corporación ambiental tienen huertas orgánicas en sus fincas, a raíz de ello se empezaron a dar cuenta de la importancia de respetar la tierra cosechando de manera limpia y alimentar a sus familias con comida orgánica. Ocasionalmente venden sus productos, aportando no solo con la venta sino con el ahorro a la economía de su hogar, por lo que los hombres les empiezan a dar mas participación y ellas se empoderan. Sin embargo la venta es poca y su capacidad de producción es alta. Queremos crear una plataforma que les ayude en la parte técnica (finanzas, técnicas para mejorar los cultivos, como predicción del clima, etc) y ademas conectarlas con restaurantes para la venta de sus producto